¡Apreciemos lo que tenemos!

A menudo en el camino,
nos dejamos desanimar,
y por ver solo las nubes,
no vemos el sol brillar.
No logramos ver lo bueno,
que nos trae el nuevo día,
por estar tan concentrados,
en los obstáculos de la vía.
En vez de fijar la atención,
en tantas cosas hermosas,
hay la nociva tendencia,
de enfatizar las penosas.
Malgastamos el tiempo,
ansiosos y preocupados,
sin apreciar las maravillas,
que Dios nos ha regalado.
Por pensar tanto en lo malo,
en lo que causa inquietud,
dejamos a lo negativo,
colorear nuestra actitud.
Permitimos al pesimismo,
minar nuestro interior,
y sin darnos cuenta perdemos,
la motivación y el valor.
Olvidamos que el arco iris,
necesita de lluvia y de sol,
y que el Padre celestial,
de todo tiene el control.

No vemos que si el problema,
carece de solución,
¿para qué gastar el tiempo,
en vana preocupación?
Olvidamos que lo que hoy,
parece ser tan importante,
mañana puede cambiar
y volverse insignificante.
Nos cuesta mucho aceptar,
cuán vital es la actitud,
pues si no hay esperanza,
tampoco habrá plenitud.
Pidamos a Dios darnos ojos,
para ver las dificultades,
pero también para apreciar,
de la vida sus bondades.
Nos ayude a ser positivos
y al hallar contrariedades,
aprendamos a convertirlas,
en nuevas oportunidades.
Nos enseñe a darle gracias
y a disfrutar de cada día,
viviéndolo plenamente,
con esperanza y alegría.
Saber que pese a las nubes,
el sol saldrá nuevamente,
y no importa si nublado o claro,
Dios siempre estará presente.
El nos ama y con cada día,
brinda nuevas oportunidades,
para que disfrutemos la vida,
pese a las dificultades.

Poema de Sigli Probst
Panamá




Salmo 118:24 Este es el día que ha hecho el Señor, gocemos y alegrémonos en él.

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